La ubicación ideal. A dos minutos en coche de Canillo y a cinco minutos de el Tarter. Piso bastante amplio, bien organizado. Parada de bus enfrente de nuestro edificio.
Internet de pago demasiado caro y lento. El primer día no lo encontramos limpio, simplemente tenía pasado una escoba y ya. Fue abrir el armario de los vasos y encontramos como ceniza. Las estanterías, mesillas etc tenían bastante polvo que limpiamos nosotros. Parking de pago, excesivamente caro, 10€/día. Cuando te dispones a pagarlo, resulta que no hay plazas y, en nuestro caso, teníamos que ir a aparcar a 10 minutos andando. Decir que había un estacionamiento al lado que lo tenía cerrado la policía. Tanto el internet como el aparcamiento no lo garantizan, depende del piso. Es probable que en otro edificio tengan dónde aparcar cerca y el internet puede ir peor en otros edificios o no estar operativo.